El papel emergente del cirujano de Mohs en la gestión avanzada del carcinoma basocelular localmente avanzado
Introducción
El carcinoma basocelular (BCC) es el tipo de cáncer cutáneo más frecuente, representando aproximadamente el 80% de los tumores malignos de la piel no melanoma. Aunque la mayoría de los casos pueden resolverse con técnicas quirúrgicas convencionales, una proporción significativa evoluciona hacia una forma localmente avanzada (laBCC), que plantea desafíos terapéuticos relevantes en el entorno de la dermatología y la medicina estética avanzada. En este contexto, el papel del cirujano de Mohs ha experimentado una profunda transformación, especialmente gracias a la integración de nuevas tecnologías, agentes terapéuticos y protocolos personalizados de tratamiento.
Novedad o Tratamiento
La cirugía de Mohs, tradicionalmente considerada el estándar de oro para la extirpación de carcinomas basocelulares de alto riesgo y localización compleja, ha expandido su campo de acción en la última década. La incorporación de técnicas de imagen intraoperatoria, dispositivos de mapeo tridimensional y la colaboración multidisciplinar con oncólogos dermatológicos permite hoy abordar con mayor eficacia el laBCC, reduciendo la morbilidad y maximizando los resultados estéticos y funcionales.
Características Técnicas
El procedimiento de Mohs implica la resección secuencial de capas del tumor con evaluación microscópica inmediata de los márgenes, lo que garantiza la eliminación completa del tejido tumoral preservando al máximo la piel sana circundante. Actualmente, muchos centros avanzados disponen de sistemas digitales de mapeo (como MohsAI™ o PathPresenter), criostatos de alta precisión y colorantes específicos para una delimitación más precisa de los márgenes tumorales. Además, se han incorporado tecnologías como la tomografía de coherencia óptica (OCT) y la microscopía confocal para la evaluación prequirúrgica y la planificación del abordaje.
Innovaciones respecto a modelos anteriores
Frente al método clásico, la cirugía de Mohs en laBCC se apoya ahora en estrategias combinadas. El uso de inhibidores de la vía Hedgehog (como vismodegib y sonidegib, ambos aprobados por la EMA y la FDA para laBCC), permite reducir el tamaño tumoral preoperatoriamente, facilitando la resección quirúrgica con menor sacrificio de tejido sano. Asimismo, la aplicación intraoperatoria de imágenes digitales y la integración de inteligencia artificial en el análisis histológico están optimizando los tiempos quirúrgicos y la precisión diagnóstica, reduciendo la tasa de recidivas.
Evidencia y Estudios recientes
Un estudio multicéntrico publicado en 2022 en el *Journal of the American Academy of Dermatology* (JAAD) evaluó a 112 pacientes con laBCC tratados mediante una combinación de inhibidores Hedgehog y cirugía de Mohs, demostrando una tasa de curación del 92% a 24 meses, frente al 78% con cirugía convencional. La reducción del tamaño tumoral prequirúrgico permitió la preservación de estructuras anatómicas clave y una mejora significativa en los resultados estéticos postoperatorios.
Ventajas y Limitaciones
Entre las ventajas destaca la máxima conservación de tejido sano, la menor tasa de recidivas (<5% a 5 años en manos expertas), y la posibilidad de realizar reconstrucción inmediata en zonas estéticamente sensibles (nariz, párpados, labios). Sin embargo, el procedimiento requiere una infraestructura específica (laboratorio histológico intraoperatorio, equipamiento avanzado), personal altamente cualificado y puede ser más costoso (coste medio por intervención completa entre 900 y 1.500 € en España). Además, la duración del procedimiento y la mayor demanda de recursos limitan su disponibilidad en centros no especializados.
Opinión de Expertos
El Dr. Enrique Herrera-Acosta, referente en cirugía dermatológica avanzada en España, destaca: “La cirugía de Mohs, apoyada en nuevas tecnologías y terapias dirigidas, constituye la mejor opción para el manejo de laBCC en áreas de alto valor funcional y estético. La colaboración con oncólogos y la personalización del tratamiento son claves para optimizar resultados y reducir secuelas”.
Aplicaciones prácticas en centros y clínicas de estética y medicina estética
En clínicas médico-estéticas y centros de dermatología avanzada, la cirugía de Mohs se posiciona como la técnica preferente para laBCC en localizaciones faciales, especialmente cuando se requiere una reconstrucción estética inmediata. La integración de plataformas digitales de mapeo y la formación continua del equipo profesional son aspectos diferenciales para ofrecer este servicio con garantías. Por otro lado, la combinación con terapias tópicas (imiquimod, 5-fluorouracilo) o sistémicas (inhibidores Hedgehog) permite abordar casos complejos que anteriormente se remitían directamente a cirugía convencional o radioterapia.
Conclusiones
El papel del cirujano de Mohs ha evolucionado de forma notable en la gestión avanzada del carcinoma basocelular localmente avanzado. La combinación de técnicas micrográficas, nuevas tecnologías de imagen, fármacos dirigidos y una perspectiva multidisciplinar han mejorado de forma significativa las tasas de curación, los resultados funcionales y estéticos, y la calidad de vida de los pacientes. Para los profesionales del sector y responsables de clínicas, la inversión en formación específica, equipamiento avanzado y protocolos personalizados es hoy una apuesta segura para posicionarse en la vanguardia de la dermatología y la estética médico-quirúrgica.
(Fuente: www.dermatologytimes.com)