El ejercicio físico regular reduce el riesgo de demencia y depresión en pacientes de estética avanzada
Introducción
En el ámbito de la estética avanzada y la medicina estética, la salud integral del paciente es un factor cada vez más relevante. Las tendencias actuales en los centros de estética y clínicas médico-estéticas van más allá del tratamiento superficial, integrando estrategias de bienestar que incluyen la promoción de hábitos saludables. Entre estos, la actividad física ha cobrado especial importancia, no solo por sus beneficios sobre la composición corporal y la piel, sino también por su impacto en la salud mental y cognitiva. Recientes investigaciones sugieren que el ejercicio regular puede reducir el riesgo de desarrollar demencia y depresión, aspectos que repercuten directamente en la satisfacción y fidelización de los pacientes de estética avanzada.
Novedad o Tratamiento
El concepto de prescripción de ejercicio físico como complemento a los tratamientos de estética avanzada está ganando terreno en el sector. Se recomienda incorporar rutinas de actividad física moderada a intensa, adaptadas a la edad y condición física de cada paciente, como parte de los protocolos integrales en centros y clínicas de estética y medicina estética. Esta recomendación no solo optimiza los resultados de tratamientos como la remodelación corporal con aparatología (Indiba Deep Care, LPG Endermologie, BTL Emsculpt Neo), sino que contribuye a la prevención de problemas neuropsiquiátricos, mejorando la calidad de vida y el bienestar psicoemocional de los usuarios.
Características Técnicas
Desde el punto de vista técnico, la integración de la actividad física en protocolos de estética avanzada puede estructurarse en programas personalizados de ejercicio aeróbico (caminar, correr, nadar, ciclismo), resistencia muscular (uso de bandas elásticas, pesas ligeras, plataformas vibratorias como Power Plate) y flexibilidad (estiramientos, yoga, pilates). La evidencia indica que al menos 150 minutos semanales de ejercicio moderado, o 75 minutos de ejercicio intenso, son efectivos para obtener beneficios neuroprotectores y antidepresivos. En centros punteros, ya se ofertan servicios de asesoramiento en ejercicio físico, bien mediante acuerdos con entrenadores personales, fisioterapeutas o mediante talleres grupales orientados a la salud integral.
Innovaciones respecto a modelos anteriores
A diferencia de los enfoques tradicionales centrados exclusivamente en técnicas y aparatología estética (radiofrecuencia, criolipólisis, ultrasonidos focalizados, láseres de última generación), la tendencia actual apuesta por un abordaje holístico. Los modelos de atención más avanzados integran el ejercicio físico no solo como una recomendación genérica sino como parte estructurada de los protocolos. Algunas clínicas, por ejemplo, combinan sesiones de Emsculpt Neo con programas personalizados de entrenamiento funcional, potenciando la tonificación muscular y la reducción de grasa localizada con resultados superiores a los obtenidos con aparatología sola. Estas innovaciones se traducen en protocolos combinados que mejoran la percepción de resultados y la experiencia del paciente.
Evidencia y Estudios recientes
La relación entre ejercicio físico, prevención de demencia y depresión ha sido consolidada por estudios recientes. Una revisión sistemática publicada en 2023 en The Lancet Healthy Longevity analizó datos de más de 500.000 adultos mayores, concluyendo que la práctica regular de ejercicio físico reduce en un 30% el riesgo de demencia y en un 25% la incidencia de síntomas depresivos (Livingston et al., 2023). Estos hallazgos refuerzan la necesidad de integrar la actividad física en la planificación de servicios de estética avanzada, especialmente entre pacientes de mediana edad y mayores, principales usuarios de tratamientos antiaging y rejuvenecimiento facial y corporal.
Ventajas y Limitaciones
Entre las principales ventajas de incorporar el ejercicio físico en los protocolos de estética avanzada destacan:
– Mejora de la oxigenación y vascularización cutánea, potenciando los efectos de la aparatología (radiofrecuencia, láser, ultrasonidos).
– Sinergia con técnicas de remodelado corporal (criolipólisis, HIFEM, electroestimulación).
– Refuerzo del bienestar psicoemocional, reduciendo la incidencia de ansiedad y depresión.
– Prevención del deterioro cognitivo, especialmente relevante en pacientes sénior.
Sin embargo, existen limitaciones:
– Adherencia: no todos los pacientes mantienen la constancia necesaria para obtener beneficios.
– Necesidad de personal cualificado para diseñar y supervisar los programas de ejercicio.
– Inversión en equipamiento o acuerdos con entrenadores externos, que puede aumentar el coste operativo del centro.
Opinión de Expertos
Profesionales de referencia en el sector, como la Dra. Laura Gómez (Clínica Dermafutura), subrayan: “La integración de actividad física supervisada en nuestros protocolos ha mejorado notablemente la satisfacción de los pacientes, especialmente en tratamientos corporales y antiaging. Es fundamental que este servicio sea personalizado y coordinado con el resto de intervenciones médico-estéticas”.
Aplicaciones prácticas en centros y clínicas de estética y medicina estética
En la práctica, los centros líder están implementando estrategias como:
– Programas de ejercicio funcional combinados con sesiones de aparatología corporal (Indiba, LPG, Emsculpt).
– Asesoramiento personalizado en actividad física como parte de los planes de bienestar integral para pacientes de rejuvenecimiento facial o corporal.
– Talleres de movilidad y entrenamiento, especialmente para pacientes mayores, como complemento a tratamientos de flacidez y remodelado.
– Colaboración con entrenadores personales y fisioterapeutas para ofrecer un servicio 360º, incrementando la diferenciación del centro.
Conclusiones
La evidencia científica respalda la integración del ejercicio físico regular en los protocolos de estética avanzada y medicina estética, no solo por su impacto sobre la composición corporal y la piel, sino por su potencial para reducir el riesgo de demencia y depresión. Los centros que apuestan por un enfoque integral y personalizado, combinando aparatología de última generación, principios activos eficaces y programas de actividad física adaptados, ofrecen un valor añadido diferencial, alineado con las tendencias del mercado y las expectativas de un público cada vez más informado y exigente.
(Fuente: aestheticmedicalpractitioner.com.au)